jueves, marzo 18, 2004

COLONIA MIGUEL ALEMAN POR FIN CON DRENAJE

El Sistema de Agua y Saneamiento Metropolitano (SAS), en conjunto con el gobierno municipal de Boca del Río, pusieron en marcha la introducción de drenaje sanitario en la colonia Miguel Alemán, asentamiento identificado como uno de los más atrasados del municipio, lugar donde se localizaba el basurero municipal y colindante con el Área Natural Protegida del Manglar.

El presidente municipal, Adrián Ávila Estrada, resaltó que para su administración representa el haber alcanzado la última de las ocho colonias que faltaba por urbanizar.

Efraín Deschamps Vergara, director del SAS, indicó que la inversión será mayor a los cinco millones 250 mil pesos para la introducción de más de 10 kilómetros de tubería. Los trabajos tardarán alrededor de cuatro meses y beneficiarán a una población de casi cinco mil habitantes.

Por otro lado, el funcionario reconoció que en los últimos días han registrado una gran pérdida de agua debido a las fuertes fugas provocadas durante los trabajos de repavimentación de la avenida Zaragoza, como la sufrida la semana pasada cuando una tubería de 12 pulgadas –parte de una línea troncal– localizada en Canal y Zaragoza, fue dañada por las excavadoras.

Tras aceptar que no se ha podido cuantificar cuantos litros se han desperdiciado por esa fuga, advirtió que habrá otras más dentro de la misma obra, pero afirmó que eso se debe a la antigüedad de la tubería en esa zona además de que el método utilizado para retirar el concreto –martillos hidráulicos– provoca mucha vibración que afecta a las tuberías, «pero esto no significa que se esté haciendo un mal trabajo con la maquinaria», aclaró.

Recordó que su dependencia mantiene el programa llamado «48 horas», por el cual han logrado atender todos los reportes de fugas en un tiempo máximo de dos días. El año pasado acudieron a reparar 15 fugas, en el primer trimestre del 2004 ya han registrado 3 mil atenciones, con 500 obreros dedicados específicamente para ello.

Ante este problema, el SAS ha calculado que de cada 10 litros de agua potable que producen, al menos cinco litros no llegan al usuario final.